Ulises ‘N’, de 21 años, presunto líder de la célula criminal ‘Los Capetos’, acusado de presuntamente dedicarse al secuestro carretero y , fue capturado en la zona de Hacienda Cuautitlán, en el Estado de México, luego de haber tomado el control de la agrupación tras la captura de otros jefes de plaza.
Con base en información de Ulises ‘N’ habría cometido varios secuestros junto con miembros de dicha célula criminal, además, llevaban a cabo el cobro de rescates en efectivo y llegaban a abusar sexualmente de las mujeres víctimas de plagio, ello desde que era menor de edad.
Ulises ‘N’ cayó este fin de semana en un operativo entre en coordinación con su homóloga del Estado de México. Después de la reciente captura de otros menores a su cargo en el estado en junio de 2022, se logró ubicarlo en dicha entidad vecina, luego de que huyó de Morelos.
En noviembre del 2021, durante el cumplimiento de una orden de cateo en la colonia Cuauhtémoc, del municipio de Coatlán del Río, se registró un enfrentamiento entre integrantes de dicho grupo, la Guardia Nacional, Sedena, Secretaría de Marina, FGE y Comisión Estatal de Seguridad (CES), en el que se presumió rescataron a una víctima de secuestro.
En esta refriega, resultaron heridos de gravedad cuatro agentes antisecuestros de la Fiscalía de Morelos y dos elementos de la por disparos de arma de fuego, así como dos miembros del grupo delictivo abatidos que habían intentado repeler el arribo de las fuerzas estatales y federales.
Con la detención de Ulises quedó desarticulado en su totalidad el grupo delictivo denominado ‘Los Capetos’, que en su mayoría eran muy jóvenes o incluso menores de edad, dedicado al secuestro carretero, en el corredor que va de
La zona sur poniente de Morelos se ha convertido en territorio de disputa entre grupos delincuenciales que han desatado el terror en esa región de la entidad. Tan sólo este fin de semana fueron localizados los cadáveres con huellas de violencia de dos funcionarios de Puente de Ixtla, que fueron reportados como desaparecidos el pasado 10 de enero y que, a decir del dirigente estatal del PRD, Sergio Prado Alemán, no estaban relacionados con el crimen, no tenían amenazas previas pero se quiso extorsionar con sus fichas de búsqueda.
This content was originally published here.