Los continuos bombardeos sobre Gaza han causado una destrucción a una escala nunca antes vista en la historia y, como resultado, más de 20.400 personas han perdido sus vidas, la mayoría niños, niñas y mujeres. La Franja de Gaza sigue siendo testigo de una permanente violación de los derechos humanos, que ha ocasionado (y sigue ocasionando) una catástrofe humanitaria sin precedentes. El Ministerio de Salud gazatí informó que el balance provisional de fallecidos ha superado los 20,400 desde el inicio de la ofensiva israelí hace más de dos meses y medio. En las últimas 24 horas, al menos 166 palestinos y palestinas fueron asesinados y 384 resultaron heridos, elevando la cifra total de heridos y heridas a 54,036. Dicho Ministerio detalló que las fuerzas de ocupación israelíes ordenaron a los ciudadanos de ocho barrios de la gobernación central trasladarse a la zona de Deir al-Balah. Trágicamente, una vez que obedecieron esta orden, el ejército israelí llevó a cabo cinco masacres en la zona, resultando en 28 personas fallecidas y 88 heridas. La Oficina de Información de Gaza denunció que las fuerzas de ocupación israelíes están utilizando tácticas engañosas para causar el mayor número posible de bajas civiles, especialmente entre niños y mujeres. Estos métodos constituyen un doble crimen de guerra al forzar el desplazamiento forzoso de civiles y luego atacarlos deliberadamente e inmediatamente después. La Oficina instó al pueblo palestino a actuar con cautela y vigilancia, destacando la importancia de ser conscientes de las conspiraciones y campañas engañosas dirigidas contra ellos por la ocupación israelí, que busca aumentar el número de víctimas. El ejército de ocupación israelí continúa sus ataques aéreos implacables, focalizándose en zonas residenciales de Jan Yunis, el norte de Gaza y Jabalia. En particular, la ciudad de Gaza ha sido objeto de intensos ataques, resultando en la destrucción de propiedades e infraestructuras públicas y privadas. Aviones de combate israelíes atacaron los barrios de Saftawi y Sheikh Radwan en la ciudad de Gaza, mientras que en la región norte, llevaron a cabo ataques aéreos en el campo de refugiados de Jabalia y la ciudad de Jabalia. Se informó de decenas de víctimas en un ataque israelí que apuntó a la zona de la escuela Al-Rafii y la Asociación Namaa en la ciudad de Jabalia. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, anunció que intensificaría las operaciones contra el movimiento de resistencia palestina en el sur de la Franja de Gaza, declarando que la guerra “será larga”. A pesar de los llamados a proteger a los civiles palestinos, el ejército israelí concentrará sus principales operaciones en Jan Yunis, otra fortaleza de Hamás. La comunidad internacional sigue observando con hipócrita preocupación estos hechos, pero sin la menor intención de hacer nada efectivo para impedir el genocidio que se perpetra en Gaza. Los débiles llamados a un alto el fuego y la protección de la población civil, son desconocidos por Israel una y otra vez.
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