Este martes 20 de marzo a las 8 pm haremos un recordatorio a los cien años del fallecimiento del genial pintor austriaco Gustav Klimt que significó el gran despegue del arte audaz del siglo XX en Europa.
Es quizá uno de los cinco pintores más controversiales de la historia por múltiples razones. En primer lugar, por su calidad estética, en segundo lugar, por su originalidad y capacidad creativa, en tercer sitio por su audacia y desafío a los moldes y maneras del clasicismo tradicional, además de su vida tormentosa y alteraciones psíquicas personales y familiares y finalmente por la inmensa referencia de su obra y personalidad que han hecho en libros, revistas, documentales, películas modernas y antiguas. Adicionalmente ha sido mencionado más de tres millones de veces en periódicos y más de diez millones de veces en internet.
Gustav Klimt es especialmente importante en Los Cabos por el indudable florecimiento que está dándose en este centro turístico internacional en donde confluye una impresionante migración de gente preparada y de alto nivel económico que están convirtiendo el negocio de las galerías y de los centros de pintura y escultura, lo mismo popular que de gran finura y estilización al igual que una arquitectura que empieza a desafiar a las audacias edificatorias de Las Vegas y San Francisco.
Gustav Klimt fue calificado por mucha gente recatada de su época como un inmoral o un descarado ya que su obra incluyó desnudos explícitos de mujeres hermosísimas y su conducta personal fue más que libertina para esos años. Sin embargo, como artista recibió numerosos premios incluidos la Medalla de Oro de la exposición de París de 1900. Su obra más barata el día de hoy se cotiza arriba de 20 millones de dólares, pero el retrato Bauer fue vendido en Nueva York hace relativamente poco en 135 millones de dólares.
Fue también un decadentista y un simbolista aún hoy en día indescifrable y eso hace que muchos pintores de la actualidad busquen afirmarse en su escuela y secuela. En Los Cabos hay ya más de doscientos pintores trabajando diaria y arduamente pues el ámbito cultural se ha vuelto vertiginoso y muy apreciado, por eso hay rutas del arte en San Jose del Cabo y en Cabo San Lucas y en La Paz en el Instituto Sudcaliforniano de Cultura y organizaciones privadas organizan ya con frecuencia exposiciones y muestras artísticas de gran calidad.
En La Paz el pintor que encabeza su escuela es Raúl Leal seguido muy de cerca por el atormentado artista paceño Omar Avilés conocido como Omarcillo Valiente. Pero en Los Cabos no hay duda qué quien maneja mejor los efectos aúreos y metálicos en general con el estilo Klimtiano es el pintor uruguayo Yandi Monardo junto con la pintora Conchita Kuri.
Hitler lo hizo famoso también al hacer requisado e incendiado algunas de sus obras, pero el Louvre y otros museos de París y Nueva York lo han rescatado y se exhibe la mayor parte de sus obras en el Palacio Belvedere en Viena su tierra natal. El Retrato de Adele Bloch-Bauer I, también conocida como La dama dorada o La dama de oro (en inglés: The woman in gold), es una pintura de Gustav Klimt completada en 1907. De acuerdo con informes periodísticos, fue vendida en 135 millones de dólares a Ronald Lauder, propietario de la Neue Galerie en Nueva York.
Ramón Ojeda Mestre es uno de los estudiosos de la obra de Gustav Klimt y ha colaborado en amplios espacios del Centro de Estudios Integrales de Innovación y el Territorio que dirige la maestra Tamara Montalvo a tratar de entender las raíces estéticas de las pinturas rupestres de Baja California Sur como un tronco común junto con las de Altamira y Lescaux en Europa para establecer la vocación esencial del ser humano hacia la elevación y la grandeza como lo demostró Gustav Klimt siempre atormentado con los problemas del artista y de una sensualidad que era considerada pecaminosa y fatal.
Klimt intuyó como debía ser la mujer moderna, firme, preparada, fuerte y participativa y por eso es que tiene mas de 14 millones de admiradoras en el mundo este pintor cuya película más reciente fue protagonizada por John Malkovich.
La Cafetería Macondo, obviamente, lleva ese nombre en honor de Gabriel García Márquez que fue amigo personal de Ramón Ojeda Mestre y este martes en el Centro de Cabo San Lucas al conmemorar el centenario del fallecimiento de Gustav Klimt hará un llamado a los jóvenes sudcalifornianos a estudiar las artes como complemento a cualquier actividad laboral o académica, pues ello fortalece la personalidad, el gusto y los valores éticos de los seres humanos.