A pesar de que no hay felicidad más grande que ver a un perrito viviendo en una casa, es aún más importante que sean queridos y cuidados por sus dueños. Ya que lamentablemente muchos canes en el mundo sufren distintos tipos de maltrato por parte de sus dueños.
Y para Guinea, Uva y Ónix es algo que les consta.
Guinea, Uva y Ónix son tres perritos que tuvieron una vida muy difícil antes de que los rescataran en la ciudad de , México desde sus propios hogares, donde se supone que deben recibir amor y cuidados por parte de sus dueños pero en realidad tenían todo lo contrario.
Gracias a eso, Guinea, Uva y Ónix lograron recuperarse del daño que recibieron, y lo suficiente como para ser adoptados por una numerosa familia: la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
“Una de las perritas se estaba muriendo de hambre en una azotea, a otro perrito lo golpeaban; las condiciones en las que venían los perritos y que son rescatados”, dijo el alumno Bryan Marín a Fuerza Informativa Azteca.
Junto con enternecer el ambiente de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, los perritos se han convertido en los encargados de proteger las instalaciones del recinto y facilitar la detección de drogas en las personas que ingresen, algo con lo que el Secretario de la Universidad Michoacana, Zoé infante, está de acuerdo.
Y los alumnos también celebran la adopción de Guinea, Uva y Ónix.
“Me parece bien porque pueden cuidar las entradas de que no entre cualquiera, y detecten cosas que no puedan traer”, señaló.
“¡La mejor contratación!”, “Excelente, ejemplo a seguir”, “Una gran noticia nos dan a las personas que amamos a los perritos”, “Una gran decisión” y “Gracias por darles una nueva oportunidad de vida”, dijeron algunos usuarios en Facebook. Y los más felices son Guinea, Uva y Ónix, quienes seguramente lo agradecen.
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