Carteles en pugna por Guerrero

Aunque las autoridades locales estiman que en Guerrero no habrá repercusiones por la recaptura de Ovidio Guzmán López, los hechos indican que la entidad aun es un territorio en disputa y el Cártel de Sinaloa continúa controlando algunas zonas que no está dispuesto a cederlas por lo cual se mantiene actuando a través de bandas locales que han tenido violentas confrontaciones con las que operan en favor del Cartel Jalisco Nueva Generación.

De acuerdo con reportes de seguridad, esta entidad es la 17 en donde el cártel de Sinaloa mantiene una importante presencia tanto por los cultivos como el tráfico de los enervantes.

En octubre del 2022, Evelio Méndez Gómez, titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Guerrero mencionó que Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), el Cártel de Sinaloa, la Familia Michoacana y el Cártel Independiente de Acapulco son los grupos delictivos en pugna por el control total de este territorio.

En el segundo fin de semana de septiembre de ese año, en el marco de lo que parecía una fiesta religiosa en Zirándaro de los Chávez, un grupo de hombres vestidos con uniforme militar y con el rostro cubierto, desfilaron a bordo de camionetas y fuertemente armados, existen indicios de que forman parte del grupo de Francisco Jaramillo Valdovinos, también conocido como “comandante Serio”.

En junio y agosto del 2022 se efectuaron bloqueos en Acapulco y municipios de Costa Chica, por choferes transportistas e integrantes de la Policía Comunitaria de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG).

En julio de ese año Ricardo Mejía Berdeja, subsecretario de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno Federal, señalo a la UPOEG de estar coludida con el grupo criminal conocido como “Los Rusos” que opera en Acapulco y la Costa Chica y el cual es un brazo del Cartel de Sinaloa.

Entre los documentos sustraídos de los archivos de la SEDENA por los Hackers Guacamaya, en octubre circuló el Panorama de la Upoeg” donde también se le vincula con el grupo delincuencial Los Rusos que opera en el puerto de Acapulco y Costa Chica.

En ese análisis fue entregado el 28 de enero del 2022 se revela que hay dos fracciones de la UPOEG en San Pedro Las Playas, 10 de abril, El Arenal, El Bejuco, cuyo comandante es Pedro Santos Cruz, (a) Pino y los otros en Barra Vieja y Lomas de Chapultepec, bajo la dirección de Eusebio Severiano Rodríguez, El Chevo, ambos grupos vinculados a Los Rusos.

El documento agrega que la UPOEG al carecer de un ingreso económico para solventar los gastos que genera el mantener activo su movimiento, fueron cooptados por el grupo delictivo “Los Rusos”, liderado por Carlos Alberto Navarrete Soriano (a) El Ruso y/o El Colorado, quien “obtiene a cambio casas de seguridad en las comunidades con presencia de pseudo policías comunitarios, sirviéndoles como fachada y con ello pasar desapercibidos ante las autoridades de los tres órdenes de gobierno”.

“Los Rusos” es la agrupación delictiva con mayor presencia en Acapulco, la cual según la inteligencia militar se encuentra en proceso de expansión manteniendo vínculos con la UPOEG.

“Los Rusos” formaron una alianza con José Gil Caro Quintero, Don José, Jogil, o el Pelo Chino. Ese nexo fue identificado al menos desde finales de 2015, cuando comenzó el gobierno del priista Héctor Astudillo Flores.

El vénculo entre “Los rusos” y el cártel de Sinaloa se habría concretado cuando “el Jogil” cumplió su condena de 10 años y cinco meses, tras su arresto en diciembre de 2004.

Se sabe que, y las autoridades federales lo reconocen, “el Jogil” seguía operando desde el interior de la cárcel para el trasiego de drogas provenientes de Sudamérica. Cuando fue detenido en Guadalajara, se le identificó como uno de los principales operadores de Ismael Zambada García, el Mayo. Pero sus antecedentes criminales fueron más relevantes porque es sobrino de Rafael Caro Quintero y pretende el dominio para garantizar la ruta del trasiego de cargamentos de cocaína, algunas siembras de coca ya fueron descubiertas en la Costa Grande.

Infiltrar a la UPOEG es una táctica de relevancia, porque dicha estructura tiene presencia en la Costa chica que abarca los municipios de San Marcos, Tecoanapa, Florencio Villarreal, Ayutla de los Libres, Cuautepec, Copala, San Luis Acatlán, Marquelia, Juchitán, Cuajinicuilapa, Azoyú, Ometepec, Igualapa, Tlacoachistlahuaca y Xochistlahuaca.

De esa manera asegurarían la plaza al sobrino de Caro Quintero, quien tiene a su disposición lanchas rápidas, así como aeronaves para transportar cocaína proveniente de Sudamérica. Guerrero sería una extensión más de su influencia identificada en Oaxaca, como en Quintana Roo, Chiapas, Yucatán, Campeche y parte de Tabasco.

En ese contexto, Salvador Rangel Mendoza, obispo emérito, declaró que algunos grupos delictivos podrían aprovechar la situación originada por la detención del narcotraficante Ovidio Guzmán en Sinaloa, y la violencia podría repercutir en Guerrero, pues “a río revuelto ganancia de pescadores”.

En su opinión el aumento de la violencia en Chilpancingo se debe a que la autoridad es “muy blanda” y por sus “componendas” con el crimen organizado, dado que el mismo Papa ha propuesto el diálogo con las mafias.

Además, apuntó que desde el gobierno de Héctor Astudillo Flores “las autoridades hicieron un pacto con un cartel bien conocido, y desgraciadamente cuando entró Evelyn Salgado Pineda se mantuvo ese pacto y la presidencia municipal de Chilpancingo también”.

Jacinto González Varona, presidente estatal de Morena, salió en defensa de la gobernadora quien dijo tiene el respaldo del partido y criticó a Mendoza Rangel por “salir a defender a los capos, amparados en las leyes de la libertad de culto, es tanto como abusar de la confianza de sus fieles”.

La entrada Carteles en pugna por Guerrero apareció primero en Siempre!.

This content was originally published here.