3DPSI-Studie von Ultimaker: Pandemie regt Unternehmen dazu an, alternative Lösungen mit 3D-Druck zu erstellen

La nueva investigación muestra que el conocimiento de la impresión 3D aumentó a nivel mundial al 71%. La conciencia en China fue la más alta (84%), seguida de Suiza (83%), Países Bajos (76%) y Estados Unidos (76%). El sentimiento general también fue positivo hacia la impresión 3D: el 65% de los encuestados que conocen la impresión 3D creen que será una tecnología generalizada en su industria en los próximos cinco años (aumento del 7%). Esto se corresponde con el aumento de la prioridad percibida: más de una cuarta parte (27%) de los encuestados afirmó que la impresión 3D es una prioridad de inversión (aumento del 7% en comparación con el Índice anterior) y casi la mitad (49%) cree que se convertirá en una función esencial para el negocio.

Actualmente, la implementación de la impresión 3D es más alta en Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y Francia. México también está experimentando un crecimiento; probablemente atribuido a muchas oportunidades de subcontratación provenientes de sus vecinos de América del Norte. Entre sus millones de usuarios, los plásticos y polímeros son los materiales más utilizados, con PETG (polietileno tereftalato glicol), PET (polietileno tereftalato) y PETT (polietileno coTrimetileno tereftalato) ganando terreno un 31% (aumento del 4%).

En general, el índice revela que Estados Unidos, Reino Unido y Alemania tienen las expectativas más altas para implementar la fabricación aditiva y capitalizar sus oportunidades. Todos los demás países se clasifican de la siguiente manera:

Más detalles de nivel de país disponibles aquí. 

Aunque 1 de cada 3 empresas encuestadas utiliza actualmente la impresión 3D, solo está completamente integrada en menos de 1 de cada 10 empresas. Esto supone grandes oportunidades para un mayor crecimiento en la conciencia, el conocimiento y el uso. La pandemia de COVID-19 probablemente impulsó la adopción, ya que la impresión 3D demostró ser una alternativa confiable para la innovación rápida y la fabricación local. Por lo tanto, la madurez de la adopción aumentó en 2020 con las empresas que pasaron de un pequeño equipo que usa la tecnología (Champion Stage) a una aplicación bien implementada, a veces incluso en toda la empresa, que muestra un ROI medible (Competence Center Stage aumentó un 3% y Fully Embedded Stage aumentó 2%).

Además, los casos de uso de la impresión 3D se han vuelto más avanzados a medida que las empresas buscaban continuar sus operaciones comerciales en medio de desafíos continuos. Estos casos de uso ayudaron a los ingenieros de todo el mundo a apoyar las cadenas de suministro interrumpidas de formas innovadoras. Como resultado, el 55% de las empresas que utilizan la impresión 3D producen piezas de uso final y casi las tres cuartas partes las utilizan para producir herramientas, optimizar la organización del taller y agilizar la logística. La creación de prototipos se redujo un 8%, pero sigue siendo el uso más común de la impresión 3D.

“Los fabricantes de todo el mundo tuvieron que adaptarse rápidamente cuando la pandemia cambió sus cadenas de suministro. Desde la creación de prototipos de innovaciones hasta la impresión de sus propias herramientas para mantener las máquinas en funcionamiento, aquellos con una mente abierta se adaptaron de manera más eficaz. Realmente muestra la excelente manera en que los innovadores trabajan a nivel mundial Es difícil garantizar la continuidad del negocio, la producción y la vida cotidiana, a pesar o incluso debido a los desafíos externos. Las posibilidades de la impresión 3D son realmente infinitas, por lo que es emocionante ver las increíbles soluciones que los diseñadores e ingenieros proponen. Estamos muy orgullosos de que Ultimaker ayude a las empresas a garantizar la continuidad, a pesar de las adversidades, al adoptar la impresión 3D”, explicó Jürgen von Hollen, consejero delegado de Ultimaker.

A pesar de que la impresión 3D generó resultados positivos durante la pandemia, sigue habiendo obstáculos que están frenando la implantación generalizada. Aunque estas barreras fueron ligeramente más bajas en la encuesta de 2020, las capacidades operativas (67%), el conocimiento de los empleados (65%) y la construcción de un caso comercial sólido (40%) aún limitan a las empresas a la hora de liberar oportunidades. Las capacidades operativas que son la mayor causa de preocupación para las empresas son la impresión más rápida, la integración con las herramientas y el software existentes (ecosistema) y la confiabilidad/precisión de la impresión.

Acerca de la investigación

El estudio se realizó en línea por Savanta en diciembre de 2020. La muestra abarcó a 2.525 profesionales -de los cuales 1.692 conocían la tecnología- de 12 países: Estados Unidos, México, Reino Unido, Alemania, Francia, Suiza, Italia, Holanda, China, Japón, Corea del Sur y Australia y completaron la encuesta. Los profesionales procedían de todos los niveles de negocios, así como de una amplia variedad de industrias, incluidas, entre otras, la atención médica, la fabricación, la arquitectura y la automoción.

Esta nueva investigación muestra que el conocimiento de la impresión 3D en el mundo aumentó al 71 %. El conocimiento de la impresión 3D en China fue el más alto (84 %), seguida de Suiza (83 %), los Países Bajos (76 %) y Estados Unidos (76 %). La percepción general con respecto a la impresión 3D también fue positiva: el 65 % de los encuestados que conocen la impresión 3D creen que será una tecnología que se aplicará de manera generalizada en su sector en los próximos cinco años (un aumento del 7 %). Esto corresponde a la mayor prioridad percibida: más de un cuarto (27 %) de los encuestados afirmó que la impresión 3D es una prioridad de inversión (un aumento del 7 % en comparación con el índice anterior) y casi la mitad (49 %) cree que se convertirá en una función esencial del negocio.

Actualmente, la implementación de la impresión 3D es más alta en los Estados Unidos, el Reino Unido, Alemania y Francia. México también está experimentando un crecimiento, probablemente debido a muchas oportunidades de contratación externa provenientes de sus vecinos de Norteamérica. Entre sus millones de usuarios, los plásticos y polímeros son los materiales más utilizados, con el PETG (polietileno tereftalato glicol), el PET (polietileno tereftalato) y el PETT (polietileno cotrimetileno tereftalato) ganando terreno con el 31 % (un aumento del 4 %).

En general, el índice revela que los Estados Unidos, el Reino Unido y Alemania tienen las expectativas más altas para implementar la fabricación aditiva y capitalizar sus oportunidades. Todos los demás países se clasifican de la siguiente manera:

1. Estados Unidos de América

4. Francia

Puede encontrar más información por país aquí. 

La adversidad propicia la creatividad

Si bien 1 de cada 3 empresas encuestadas utilizan actualmente la impresión en 3D, esta industria solo está totalmente integrada en menos de 1 de cada 10 empresas. Esto ofrece grandes oportunidades para un crecimiento aún mayor con respecto a su percepción, conocimiento y uso. La pandemia de la COVID-19 probablemente llevó a su adopción puesto que la impresión 3D demostró ser una alternativa confiable para la innovación rápida y la fabricación local. Por lo tanto, la madurez de la adopción aumentó en 2020, llevando a que las empresas pasaran de tener un equipo pequeño que utiliza la tecnología (etapa de coordinación) a una aplicación bien implementada, a veces incluso en toda la empresa, que muestra un retorno sobre la inversión mensurable (la etapa de centro de competencia aumentó un 3 % y la etapa de integración total aumentó un 2 %).

Además, los casos de uso de la impresión en 3D son más avanzados a medida que las empresas buscan continuar sus operaciones comerciales en medio de los desafíos actuales. Estos casos de uso ayudaron a los ingenieros de todo el mundo a apoyar las cadenas de suministro interrumpidas de maneras innovadoras. Como resultado, el 55 % de las empresas que utilizan la impresión 3D producen piezas de uso final y casi las tres cuartas partes la utilizan para producir herramientas, optimizar la organización de talleres y agilizar la logística. La creación de prototipos disminuyó un 8 %, pero sigue siendo el uso más común de la impresión en 3D.

“Los fabricantes de todo el mundo tuvieron que adaptarse rápidamente cuando la pandemia cambió sus cadenas de suministro. Desde innovaciones en la creación de prototipos hasta la impresión de sus propias herramientas para mantener las máquinas en funcionamiento, quienes tienen una mente abierta se adaptaron de la manera más eficaz. Es una muestra de la gran labor que realizan los innovadores en todo el mundo para garantizar la continuidad de los negocios, la producción y la vida cotidiana, no obstante las dificultades externas o incluso debido a ellas. Las posibilidades de la impresión 3D son realmente infinitas, por lo que es emocionante ver las sorprendentes soluciones que proponen los diseñadores e ingenieros. Estamos muy orgullosos de que Ultimaker ayude a las empresas a garantizar su continuidad, a pesar de las adversidades, mediante la adopción de la impresión en 3D” , afirmó Jürgen von Hollen, director ejecutivo de Ultimaker.

Desafíos 

Aunque la impresión en 3D genera resultados positivos durante la pandemia, siguen existiendo obstáculos que retrasan su implementación generalizada. Si bien estas barreras fueron ligeramente menores en la encuesta de 2020, las capacidades operativas (67 %), el conocimiento de los empleados (65 %) y la creación de un buen caso de negocio (40 %) todavía limitan a las empresas en el aprovechamiento de oportunidades. Las capacidades operativas que son la mayor causa de preocupación para las empresas son una impresión más rápida, la integración con las herramientas y el software existentes (ecosistema) y la confiabilidad y precisión de la impresión.

Acerca de la investigación 

El estudio fue realizado en línea por Savanta en diciembre de 2020. La muestra incluyó 2.525 profesionales de los cuales 1.692 conocían la tecnología y completaron la encuesta en 12 países: Alemania, Estados Unidos, México, Reino Unido, Francia, Suiza, Italia, los Países Bajos, China, Japón, Corea del Sur y Australia. Los profesionales procedían de todos los niveles de negocios, así como de una amplia variedad de sectores, incluyendo, entre otros, la atención médica, la fabricación, la arquitectura y el sector automotor.

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