Árboles frutales de México

El clima de México es propicio para una gran variedad de árboles frutales. Este país posee un clima cálido y húmedo gran parte del tiempo, que permiten el crecimiento de especies frutales únicas.

El mango es uno de los árboles frutales que se cosecha en 23 estados del país, siendo los principales productores las zonas de Guerrero, Nayarit y Sinaloa que suman un 53% de la producción nacional. El 47% restante de la producción proviene de Campeche, Chiapas, Colima, Jalisco, Michoacán, Oaxaca y Veracruz, ubicando a México como el quinto productor mundial de la fruta.

Este árbol es de rápido crecimiento y vida corta. Pertenece al género de la familia Caricaceae. Es originaria del sur de México, aunque muchos afirman que su procedencia es el Caribe. Puede alcanzar una altura que oscila entre 1,8 metros a 6,1 metros y posee un tallo recto, grueso, fistuloso y de unos 20 a 30 cm de diámetro.

Su fruto, la papaya, puede tener un tamaño de entre 10 a 25 cm de largo y entre 7 a 15c cm de diámetro, pudiendo llegar a pesar entre 400 gramos a 6 kilos.

Se estima que un árbol de papaya puede producir una gran cantidad de frutos, estimándose que cada planta puede producir entre 35 a 40 kg de fruta.

La temperatura ideal para el cultivo de El chirimoyo, es el tropical, no debe ser muy frío ni demasiado caluroso, ya que no resiste los extremos. Es ideal para suelos ligeros, profundos, bien drenados y con buena aireación de sus raíces.

El nombre científico de este árbol es Crataegus mexicana, que tiene una altura que va de 4 a 10 metros de altura y una copa de 6 a 8 metros.

Generalmente la fruta del árbol de tejocote se consume crudas, pero también se utilizan en la preparación de dulces o mermeladas, y se les atribuye muchas propiedades medicinales.

El nance es un árbol de crecimiento lento, que puede llegar a medir 10 metros en algunas ocasiones e incluso llegar hasta los 20 metros, que pertenece a la familia de las Malpighiáceas, Su cultivo se realiza en climas tropicales y subtropicales, es tolerante a los periodos de sequía y crece en suelos rocosos, aunque puede desarrollarse bien en suelos arenosos.

Las frutas del árbol de nance son redondas, pequeñas, de color amarillo a anaranjado y con un olor muy característico. La pulpa de la fruta es jugosa, de color blanco y contiene semillas en su interior.

Es un árbol de la familia de las rosáceas, el capulín o cerezo negro, cuyo nombre científico es “prunus serótina” puede llegar a medir entre 2 y 15 metros de altura. Es un árbol resistente al calor, a la sequía y a la salinidad. En cuanto al riego, las plantas adultas solo requieren riego durante las épocas de sequía severa, mientras que las jóvenes requieren un mayor riego.

Sus frutas, de color negro rojizo en la madurez y de sabor agridulce y astringente, con un diámetro que va desde los 12 a los 20 mm y contiene una sola semilla, se utilizan para hacer vino, almíbar y mermeladas. Es ideal para el jardín ya que es silvestre. Si bien la fruta es totalmente comestible, sus hojas semillas y tallos son tóxicas y no deben ser consumidos por personas ni animales.

Este árbol se encuentra principalmente en las zonas montañosas de México, especialmente en el Valle de México, Guanajuato y de Jalisco a Chiapas.

Este es una especie de árbol perteneciente a la familia de las rosáceas, que se cultiva en el norte de México desde Sonora hasta Chiapas. Generalmente se encuentra en los bordes de los bosques o en campos abiertos. Puede llegar a medir hasta 15 metros de altura y su fruto es de color rojo o amarillo, con pulpa color amarillo, jugoso y agridulce y con hueso.

Conocido en otros países como albaricoque o damasco es una fruta de la familia de las rosáceas, que llega a medir entre 4 a 6 metros y requiere un clima seco para florecer. El área de producción en México es la zona de Sonora, Zacatecas y Puebla. Su cosecha se realiza entre los meses de abril a junio y es posible encontrar variedades como Royal, Tilton, Royal Blenheim, Anita, Nugget, Canino, Tania, Marité entre otras, en la región centro norte de México.

Otros árboles que se encuentran en México son los del avellano, del nogal, del castaño, del roble y del almendro, que pertenecen al grupo de frutos secos que producen frutos encerrados en una cáscara.

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