Héctor Parra Rodríguez – Las incongruencias del «humanistas» de AMLO

Por José Sobrevilla

Lo mejor que le puede pasar al sistema penitenciario nacional, en esta Cuarta Transformación, es una reforma seria y urgente al conjunto carcelario. En México, la primera que se realizó fue en la época de Porfirio Díaz; años después, en los setenta, llegó la segunda con Alfonso Quiroz Cuarón y, de esa fecha para acá nada; “si los penales generaran votos, más de un político, seguramente, habría incluido en su programa de promesas de campaña el tema”, dijo un amigo a este reportero; pero no, y por ello los penales del país se han convertido territorio de negocios turbios, hacinamientos, motines, fugas, y sistemática violación de los derechos humanos, además de un largo etcétera.

Para que el desorden carcelario no salga de control, habría de crear un “verdadero sistema penitenciario nacional”, porque como tal no existe uno. Tampoco una integralidad; cuando me preguntan ¿Cuántos sistemas carcelarios hay?, siempre respondo que 400, o sea el mismo número de cárceles existentes, porque cada cárcel es manejada con el libre albedrio de quienes las dirigen”, comentó un especialista, que nos pidió omitir su nombre. También nos reveló que 97% de los directores de prisiones “no tuvieron preparación, ni capacitación ni experiencia previa para manejar una cárcel”, añadiendo que la mayoría de los penales del país se encuentran en autogobierno.

“Autogobierno, personal insuficiente, malas condiciones de higiene, deficientes servicios de salud y programas para la reinserción prevalecen en cárceles del país”[1], arrojó el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2019 publicado por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, CNDH.

– ¿Qué tan difícil es manejar una cárcel?

– Es lo mismo que manejar una sociedad, pero en cuatro muros; porque adentro hay todo lo que existe afuera, en la sociedad: ricos, pobres, más pobres que ricos, cultos, ignorantes, malos, inocentes, culpables, todo revuelto; por ello ‘no puedes homologar algún tratamiento o mucho menos’. “Es innegable la astucia del presidente, porque ahora presume como un logro de su gobierno el que –lograron negociar– que, cuando se terminen de pagar las cárceles, estas pasarán al gobierno; sin embargo, ‘que no sea mentiroso’ porque así ha estado siempre estipulado en el contrato”.

Algo positivo del gobierno anterior fue la creación del ‘sistema federal de prisiones’, lo que significa que todos los presos por delitos federales, incluyendo los súper-narcos, que han estado en prisiones estatales, pasarían a las cárceles federales; sin embargo, hasta ahora, la mitad de los reos federales se encuentran en penales estatales porque no caben en las federales. Son muy pocas.

Se reconoce el logro, sin embargo, para desgracia nuestra, fue y es asesorado por la Asociación de Correccionales Americana, ACA, una Asociación Civil fundada por ex carceleros y expresos en 1857, quienes se abrogan el derecho (y cobran muy caro, en dólares), por venir y revisar 17 puntos y darte un certificado donde dice “Certificada por la ACA”.

Consultados para esta columna, especialistas penitenciarios han coincidido en que “Esto ameritaría hasta una nota diplomática”, porque, además, el recurso para esta Asociación viene etiquetado en el Plan Mérida; esto es, ellos escogen en qué se van a gastar el dinero que otorgan y con quiénes.

El mexicano sistema de prisiones federales fue creado con Genaro García Luna al frente, y con Patricio Patiño como subsecretario, huelga decir que sin tener la menor idea de lo que era una cárcel, porque jamás trabajaron en una, nombraron como comisionado a Enrique Gómez García, un General joven, de los que escogieron con Macedo de la Concha y les hicieron un ‘Doctorado fast track’ (en Administración Pública) en la Universidad Anáhuac; sin embargo, pese a ello, tampoco conocían nada del tema.

Desde entonces han usado y siguen usando el sistema gringo de trato y maltrato a los reos; pero si volteamos hacia la Unión Europea, ellos han calificado al sistema penitenciario norteamericano, como “el peor del mundo”. También, en una reunión de jueces en Costa Rica, fue recalcado lo anterior, ¿por qué? simplemente porque cuentan con un índice de reincidencia que ha fluctuado entre el 72% y el 92%; incluso, por “buen comportamiento”, les reducen la sentencia a presos de alta peligrosidad en 10 o 20 años, razón por la cual salen con la misma peligrosidad con la que entraron.

A propósito de ello, en esta columna (Noreste.net /19 de abril), les contaba del caso de Juan José Bernabé Ramírez, quien participó en la tortura y muerte de Enrique ‘Kike’ Camarena quien, de ser condenado a cadena perpetua, fue liberado hace unos días de una cárcel norteamericana[2] y dejado en Chihuahua, México el 7 de abril pasado, para ser concretos.

El caso es que se construyeron las cárceles federales, pero, como no se podían realizar mediante concurso porque, si hay 20 candidatos en la licitación, vas a repartir 20 planos, diseños, en el mismo número de personas, y esa es una “información de seguridad nacional” que no puede andar por todos lados.

– ¿Qué hicieron?

A los multimillonarios que tenían constructoras, el gobierno le dio dos cárceles a cada uno. Hablamos de Carlos Slim, Chiapas y Morelos, Olegario Vázquez Raña, Durango y Michoacán, Hipólito Gerard Rivero, Grupo Higa, cuñado de Carlos Salinas, dos más; Don José de Jesús García, de Monterrey, que se salió a la mitad del camino y se las vendió a Carlos Slim. ICA también recibió dos penales.

Finalmente, López Obrador cerró los penales de Islas Marías, las viviendas donde vivían los presos en trece campamentos, así como todas las oficinas de Puerto Balleto: La escuela, el hospital, las oficinas de gobierno, teléfonos, telégrafos, todo, dizque para hacer excursiones de campamentos ecológicos y culturales.

“Lo más seguro –nos dijo uno especialista– es que han sido habilitados para mandar chamacos a entrenar como guerrilleros y a darles entrenamiento ideológico para defensa de la Cuarta Transformación, porque ahí no entra ningún periodista. Nadie puede llegar a Islas Marías sin permiso; además no ha habido, en tres años, un solo aviso, anuncio, invitación o inscripción para asistir a un campamento.

Desde que se firmaron los contratos mencionados, renegociados y dados a conocer por Rosa Icela Rodríguez, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, la semana pasada[3] (ver nota), se hizo un Fideicomiso y la cabeza de sector fue Banobras. Ellos se coordinaron para financiar a los multimillonarios por si necesitaban lana para construir las cárceles federales, según revelación a este periodista.

Sin embargo, el problema estuvo en que les dieron a escoger el terreno en el que se construirían los penales, “cosa que el presidente ignora”; también les otorgaron la construcción, equipamiento y operación de todos los servicios generales que, realmente, no significan una “privatización” sino una “subrogación” de servicios.

Solicitaron les dieran “cocinas, panadería y tortillería, lavandería, almacenes, servicios generales, mantenimiento de la cárcel, jardinería, limpieza de oficinas y todos los otros servicios”; pero nunca la seguridad, como un día dijo el presidente que, según esto, estaba subrogada la administración de la cárcel, lo que tampoco ha estado ni está en manos de los dueños de las cárceles. “Los servicios técnicos penitenciarios, psicología, trabajo social, medicina, psiquiatría, odontología, pedagogía, reclutamiento laboral, bolsa de trabajo, y criminología, todas estas áreas, dependen del gobierno federal y son empleados del mismo quienes la realizan”.

La seguridad de los penales siempre ha sido del gobierno. El audio y video, que es el sistema especial de seguridad, lo operaba el gobierno a través de la Policía Federal; el área de inteligencia. Ellos podían ver y oír todo lo que querían en todos lados de la isla, menos visita íntima, visita familiar, ni locutorios, “porque cuando hablabas tras las rejas con tu abogado, te podía ver la cámara, pero no escuchar, porque si algún abogado los demandaba podía tronar toda la cárcel federal. Era como irte a confesarte con un sacerdote. Cuando hablas con tu abogado, el secreto de tu defensa es un derecho”.

A cambio de lo anterior, el gobierno ha venido pagando 100 millones de pesos al mes (durante veinte años), así tuvieras 800, 200 presos, o estuviera la cárcel llena. Si rebasabas el cupo se pagaba un monto extra mensual. Este pago, de los cien millones, incluían la construcción, proyecto arquitectónico, equipamiento, etcétera. “De tal manera que, si tu invertías unos 8 o 9 mil millones de pesos, que es lo que yo calculo, durante 20 años ibas a sacar 22 mil millones, compartieron especialistas penitenciarios.

Imagínate, señaló un entrevistado, “La cárcel de Guanajuato es el colmo, ya que se la entregaron a BlackRock: La iglesia en manos de Lutero”. Laurence D. Fink, Demócrata, es fundador, presidente y director ejecutivo de este corporativo. Él y siete socios fundaron BlackRock en 1988 y, bajo su liderazgo, la firma se ha convertido en un líder mundial en soluciones de inversión y tecnología[4]. Su sede se encuentra en Nueva York y maneja más de 7.3 billones de dólares (17 veces el Producto Bruto Interno de Argentina y alrededor del 30% del de Estados Unidos) y un número enorme de clientes y proveedores en todo el mundo.

A manera de chisme, el 24 de septiembre de 2020, la BBC (Lucy Hooker) publicó que “De acuerdo con las nuevas normas, los trabajadores de BlackRock deberán informar a sus superiores si se están viendo fuera del trabajo con alguno de sus 16.000 colegas. Más aún, la nueva política exige que los empleados informen de sus relaciones con «colaboradores externos» que tengan vínculos con lo compañía”[5] lo que podría acabar afectando aspectos de la vida privada de cientos de miles de personas.

[1] Melissa del Pozo https://www.milenio.com/policia/cndh-carceles-mexico-autogobierno-malas-condiciones#:~:text=23%3A44%3A26-,Autogobierno%2C%20personal%20insuficiente%2C%20malas%20condiciones%20de%20higiene%2C%20deficientes%20servicios,los%20Derechos%20Humanos%20(CNDH).

[2] https://noreste.net/jose-sobrevilla-peligroso-asesino-liberado-por-eu-en-chihuahua/

[3] https://noreste.net/jose-sobrevilla-situacion-actual-de-los-reclusorios-federales/

[4] “BlackRock: la polémica regla del gigante de las inversiones para controlar las relaciones de sus empleados” https://www.bbc.com/mundo/noticias-54275024 consultado el 27.04.2021

Esta es opinión personal del columnista