Inminente la reforma de las 40 horas | Noticias de Tijuana | El Imparcial

Inminente la reforma de las 40 horas Existe mucha controversia en torno al proyecto de reforma de las 40 horas, el cual propone reducir la jornada laboral de trabajo en México. ¿Por qué hay tantas discusiones al respecto? ¿Será viable? Existe mucha controversia en torno al proyecto de reforma de las 40 horas, el cual propone reducir la jornada laboral de trabajo en México. ¿Por qué hay tantas discusiones al respecto? ¿Será viable? Es muy probable que se apruebe tarde o temprano y eso es inminente. Sin embargo, hay varios aspectos a considerar para sostener las relaciones laborales en nuestro país y garantizar las contribuciones federales. Cabe recordar que la Ley Federal del Trabajo permite como máximo seis días laborables a la semana por un día de descanso, cada día con una jornada máxima de 8 horas en el día y 7 horas en la noche, resultando un total semanal de 48 horas en el día, 42 horas en la noche y 45 horas en la jornada mixta. La iniciativa que está en análisis intenta reducir la jornada a cinco días de trabajo por dos de descanso, por lo que la jornada máxima semanal quedaría de 40 horas como máximo en el día, 35 horas en la noche y 37.5 horas en la mixta. Actualmente la ley permite que entre trabajador y patrón fijen la duración de la jornada de trabajo sin que exceda, claro, de los máximos legales. Actualmente ambos pueden acordar repartir las horas de trabajo, a fin de permitir el reposo del sábado en la tarde o cualquier modalidad equivalente, mientras no rebase de los máximos mencionados. Eso es válido conforme a la legislación actual, que no quepa confusión: Si existe alguna empresa que abuse de las disposiciones actuales aplicando jornadas inhumanas, debe ser debidamente sancionada. Pero no debe afectarse a las empresas cumplidas y a los buenos trabajadores que desean formar trayectoria dentro de su empresa. La reducción de la jornada laboral es necesaria, pero debe implementarse gradualmente, ya que entre los países que forman parte de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), México ocupa uno de los últimos lugares. Por lo tanto, si es importantísimo incentivar la productividad de forma sustentable. Sabemos que en el sector de manufactura hay un alto nivel de cumplimiento. Sin embargo, los sectores de servicios verán difícil mantenerse si se impone de golpe. Algunos de esos aspectos son: Escasez de personal calificado para cubrir las vacantes. Incremento a los costos de nómina provocará cierres y despidos por el pago de horas extras y descansos trabajados. El costo fiscal de la nómina se encarecerá aún más. Afectación al sector gubernamental en todos sus niveles, incluyendo a PEMEX, CFE, IMSS, etc. cuyos empleados y funcionarios laboran más de 40 horas. El impacto será enorme sin una transición gradual de adaptación, como se ha discutido en el parlamento abierto. Desaparición de pequeñas y medianas empresas, las cuales apenas sobreviven. Inviabilidad de las empresas con empleos formales afectará el pago de contribuciones federales. En fin, todos estamos a favor de mejorar la calidad de vida, pero hay que analizar con seriedad las consecuencias que tendrá para nuestro país. Aspiramos a tener más tiempo libre, pero si se pierde el balance los primeros afectados serán quienes verán disminuidas sus oportunidades de empleo. Cuando a las empresas les va bien, su rentabilidad se traduce en contribuciones. Requerimos mejores oportunidades de trabajo y desarrollo, sin afectar los ingresos del Estado. Si a las 40 horas, pero preservando la calma y el equilibrio entre los factores de la producción en beneficio de todos los sectores de nuestro México.