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La Teoría sobre la Felicidad de Einstein

La Teoría sobre la Felicidad de Einstein | Su consejo corto para ser feliz

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Que Albert Einstein nos cambió la vida en muchos aspectos, es una verdad universal sabida por casi todo el mundo. Gracias a su Teoría de la relatividad, conocemos el concepto de la gravedad, lo que dio lugar al estudio científico del origen y la evolución del universo. Esta más que demostrado que Einstein era una mente privilegiada capaz de darnos respuesta a grandes incógnitas. Dejando a un lado preguntas tan universales y enormes como puede ser el origen del universo, de los astros, de los planetas, nos acercamos a una pregunta mucho más mundana y mucho más cercana a nosotros; el origen de la felicidad. Pues bien, existe también una teoría sobre la felicidad de Einstein. ¡Cómo lo oyes! Este gran científico era capaz de entender algo tan complejo y amplio como el universo o algo tan concreto y abstracto como la felicidad.

¿En qué consiste la teoría sobre la felicidad de Einstein?

Esta teoría de Einstein es mucho más fácil de entender sin el peligro de convertir nuestro cerebro en un agujero negro. Y no solo es fácil de entender, sino que además es fácil de aplicar en tu propia vida.

Albert Einstein se volvió a hacer famoso en 2017 no por un tema relacionado con ondas gravitacionales, ni siquiera por alguna teoría sobre la dilatación del tiempo. El científico saltó a la fama cuando se dio a conocer la teoría sobre la felicidad de Einstein.

Ocurrió el 24 de octubre de 2017 cuando una simple nota manuscrita por el propio Albert Einstein alcanzó la cifra de 1,56 millones de dólares en una subasta en Jerusalén. En un simple bloc de notas de un hotel figuraba a teoría sobre la felicidad de Einstein, que no se puede consideran tanto como un artículo científico, sino más bien como un texto inspirador.

La nota decía:

“Una vida tranquila y modesta trae más felicidad que la búsqueda del éxito combinado con una constante inquietud”.

En su origen, se creyó que el precio de esta carta oscilaría entre 5000 y 8000 dólares, teniendo en cuenta la casa de subastas que la estaba cursando. La sorpresa fue evidente cuando en esa subasta el precio empezó a elevarse rápidamente y enseguida alcanzó las seis cifras.

En otra nota se leía: “cuando hay una voluntad, hay una manera”. Es una frase que en principio no dice mucho pero que en realidad es muy reveladora. Te explicamos por qué.

Estas notas que se compraron a unos vendedores anónimos, resultaron ser unas piezas autografiadas de un bloc de notas de un hotel de Tokio. Pero no es algo aparentemente tan simple, detrás de estas notas, existe una preciosa historia.

En 1922 Einstein viajó al Imperial Hotel en Tokio por una gira de conferencias cuando se alzó con el premio Nobel. Un botones del hotel se acercó a la habitación de éste para entregarle un mensaje pero el físico no disponía de monedas sueltas para darle una propina al chico. Solo tenía billetes grandes pero el empleado, cumpliendo con las estrictas reglas del hotel, se negó a aceptarlo.

Einstein no quería dejar al chico con las manos vacías, así que garabateó dos mensajes con el membrete oficial del hotel, los firmó y se los entregó al botones diciendo: “Si hay suerte, estas mismas notas valdrán algún día más que que ninguna propina”. Sin duda, podría tratarse de una profecía ya que, aunque inicialmente, la nota se pretendía vender por unos 6000 dólares, acabó alcanzando la cifra de 240.000 dólares.

Esta es la historia que cuenta el vendedor de las notas que actualmente vive en Hamburgo, Alemania, y se comenta que es el nieto del hermano del misterioso botones del hotel.

Sea o no cierta la historia, lo que Einstein escribió en esas notas no puede negarse. La teoría de la felicidad de Einstein es muy sencilla y basta con conformase con lo que cada uno tiene. Sobre esa verdad universal también existe una gran frase de Buda que dice:

“No es más rico quien más tiene, sino quien menos necesita”

Y es que la verdadera felicidad está en valorar lo que se tiene y en no anhelar lo que no se tiene, ya que eso solo provoca frustración, lo que lleva a la infelicidad.  Si tenemos poco apego a las cosas materiales, cultivaremos esa no dependencia y así, la falta de ellas no nos afectará en nuestro nivel de felicidad. ¿Simple? ¡Pues para nada! En un mundo cada vez más consumista, es complicado renunciar a algunos privilegios, algunos lujos o incluso a algunas comodidades que, si lo analizáramos honestamente, nos daríamos cuenta que son completamente prescindibles.

¿Qué opinas tu? Según esta teoría sobre la felicidad de Einstein es fácil ser feliz. ¿Piensas lo mismo? ¿Crees que simplemente aplicando este consejo viviríamos contentos y felices? Danos tu opinión ¡Estaremos encantados de leerte!

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