Lagunera apoya a productores de miel

Laura Patricia Sarmiento Covarrubias, de 31 años, es la emprendedora detrás de Panalito Mío, empresa social que comercializa la miel directamente de apicultores de la Laguna.

Iniciaron con la venta de miel sin ningún proceso de calentamiento o adulteración, a fin de que no pierda sus propiedades, cruda y natural, pero actualmente cuenta con cinco floraciones o “sabores”, que son miel de mezquite, de azahares, de multiflora (algodón, flor del melón, sandía, tomate), de sorgo y de aceitilla. Para este año, se espera contar con miel de pinabete y de orégano, ésta última se da en Jimulco.

También se han agregado más productos como el polen de abeja, el propoleo y jabones de belleza con base de miel. Este año se prevé iniciar con velas naturales de cera, así como una línea de hidromiel, que es una bebida ancestral, creada por los vikingos y griegos, de la que nacieron las bebidas alcohólicas.

“Tiene un sabor tenue y refrescante, es la favorita para el segmento de las mujeres”, comentó.

Las principales clientas son las mamás preocupadas por ofrecer a su familia alimento de calidad, por lo que han encontrado en la miel una fuente de energía saludable. Entre sus beneficios, la miel es un antibiótico natural, cicatrizante, previene infecciones, el polen eleva las defensas, el propoleo ayuda a las vías respiratorias.

Para Laura, ha sido fundamental que los cimientos de la empresa sean revalorizar la apicultura en La Laguna, pues en 2016 fue el colapso de colmenas y un 60 por ciento de la población de abejas murió por el uso de insecticidas, por lo que colaboró en proyectos para rescatar las colmenas y traer de otros estados a la región, conoció historias de los apicultores, en su mayoría adultos mayores de 60 años, y cuya actividad es básica para la polinización de otros cultivos.

En 2018, nació Panalito Mío para apoyar a los apicultores, visualizar su trabajo, pero la joven ha buscado mantener precios justos, pagar bien a los apicultores por su complicada tarea y no tanto una cultura de generar utilidades o lucrar.

“Es una empresa social que busca un impacto al medio ambiente, a los socios, a los proveedores, no solamente generar utilidad”, expresó la egresada de la licenciatura en Negocios Internacionales. En este sentido, recomienda a los emprendedores que busquen algo que les apasione y que valoren.

“Si solo lo haces por generar dinero, no agregas esa pasión que te hace sentir vivo, si sabes que te hace sentir mejor persona o entrar en un reto, le vas a echar más ganas, ahí vas a ir realizando un legado”, comentó.

Los productos están disponibles en 15 puntos de venta en la región, que pueden ser consultados en sus redes sociales.

Laura señaló que en México se consumen, en promedio, 300 gramos de miel al año, un nivel muy bajo en comparación a lo países europeos, aunque ha aumentado debido al COVID-19. No obstante, indicó que la empresa busca también concientizar a la gente e informar los grandes beneficios que tiene la miel, que es considerada un súper alimento.