Marlaska: “Hay hechos a condenar, si se condena en genérico se está blanqueando a la extrema derecha” | Hora 25 | Actualidad | Cadena SER

Hoy se ha celebrado el debate en la SER previo a las elecciones de Madrid del próximo 4 de mayo, marcado tanto por la ausencia de Isabel Díaz Ayuso, que no ha querido debatir, como por el abandono del debate por parte de Pablo Iglesias, al no considerar suficiente la condena de la violencia realizada por Rocío Monasterio ante las cartas amenazantes. En declaraciones previas al debate de la SER (en RNE), había puesto en duda la veracidad de las amenazas de muerte referidas.

Tras un bronco inicio del debate, el exvicepresidente segundo del Gobierno ha considerado “muy grave” e “intolerable” que participen en estos debates miembros de la ultraderecha que cuestionen que esas amenazas sean ciertas y ha lamentado que los medios estén “blanqueando el discurso del fascismo”. En concreto, Monasterio ha dicho que cree “poco” a Iglesias y que los españoles, cuando escuchan algo del líder de Podemos, siempre dudan, porque, ha añadido, “nos ha engañado vilmente”.

Esto es lo más destacado de la entrevista al ministro Marlaska en ‘Hora 25’: 

“Las investigaciones sobre las amenazas avanzan. Tenemos unos profesionales cualificados. Los hechos acaban de producirse, dejemos el tiempo imprescindible y necesario”. 

“No puedo dar más datos. La reserva es necesaria. Yo a los policías y guardias civiles, por mis 30 años de servicio público previo, les pido profesionalidad y neutralidad. No estoy detrás. Son profesionales y me dan muchas lecciones diarias”. 

“No sé por qué yo, María Gámez y Pablo Iglesias. Hay que preguntarle al autor. María Gámez fue un descubrimiento mío cuando llegué al ministerio. Nada más llegar teníamos problemas importantes en 2018, como la inmigración irregular en la zona del Estrecho, y teníamos el problema del Campo de Gibraltar, y desde el primer momento me impactó su fuerza en todos los sentidos. Es una persona con tales valores y tal valía. Es la primera mujer directora de la Guardia Civil. Es fácil fijarse en una persona de esa calidad que afronta con seriedad y firme sus funciones. Lo mismo pasa con Iglesias, también es fácil fijarse en él”. 

“Tenemos una información concreta, el riesgo de terrorismo de extrema derecha no se ha incrementado de manera preocupante. Tenemos una Policía y una Guardia Civil completamente ejemplares. Tenemos una garantía de servicios judiciales importante. Insisto, el riesgo no se ha incrementado de manera significativa. El riesgo de terrorismo de extrema derecha existe pero no se ha incrementado de manera significativa”. 

“No nos tenemos que adelantar para ver si las cartas proceden de este marco. Evidentemente esto no quiere decir que le quiten gravedad a los hechos. Pueden no ser hechos terroristas, pero son hechos de naturaleza delictiva. No se puede naturalizar que un ministro, la directora de la Guardia Civil y un exvicepresidente y candidato reciban unas cartas de estas características (…) No podemos no darle importancia”. 

“Hemos vivido situaciones en las que nos han amenazado. ¿Sois consciente de esa banalización de la que hablamos? No ha vivido lo que es el cultivo de la amenaza y si lo han vivido no ha sido de la manera que le ha dejado huella. Juez, vasco, novio euskaldun, tres de la madrugada… No saben lo que es”. 

“Yo nunca he tenido miedo. Viniendo de Euskadi nos vinimos sin que nos subvencionaran. Gorka vino de interino. Nosotros queríamos vivir otra realidad, no queríamos una realidad tan dura. No nos vimos por miedo, nos vivimos por esa situación. Yo decía que no me iba por miedo. No me recuerda a esa etapa, pero mis defensas se activan. Ahora que mi tierra ha recuperado mucha de la dignidad…”

“No he visto el debate, he visto cortes. Me habría gustado verlo en directo, pero lo que he visto es muy triste. Es muy triste que eso suceda en nuestro país a las once de la mañana, con la gente despierta y consciente. No es en otras horas, otros lugares u otras condiciones, que tampoco sería justificable. Me parece muy raro”. 

“Me parece que para sentarse hay un mínimo a exigir. Hay unos hechos a condenar. Si se hace mal, si se condena en genérico, es blanquear a la extrema derecha. No hay delitos de odio si no hay discurso de odio. A ver si nos entra en la cabeza. En alguna religión se ha dicho algo incuestionablemente delictivo sobre la mujer, se denunció y todo lo vimos correcto. ¿Por qué no lo hacemos con todo?”.

“Si hay representantes públicos que se vanaglorian en redes de una escultura vandalizada de Largo Caballero, si a eso añades discursos en el Senado, en los medios… ¿Qué queremos?”.