Pone fin a la polémica; entre aplausos sale De la Huerta del senado

F inalmente, luego de que Adolfo de la Huerta fuera acusado de hacer mal uso de los recursos públicos mientras se desempeñó como secretario de Hacienda, el ya candidato presidencial solicitó derecho de réplica para justificar de manera pública ante el Congreso de la Unión su actuación al frente de la entidad fiscal. De la Huerta se encontraba adhiriendo partidarios a su causa. Las manifestaciones delahuertistas se apoderaron de las calles de la capital. Por su parte, Plutarco Elías Calles recorría Puebla y el Estado de México como parte de su gira proselitista. DESDE LA TRIBUNA DEL CONGRESO Ante un pletórico salón de sesiones del Senado de la República, entre legisladores, prensa y curiosos, el candidato a la Presidencia, Adolfo de la Huerta, se paró frente al estrado e hizo uso de la palabra para defenderse de las acusaciones lanzadas en su contra por parte del secretario de Hacienda, Alberto J. Pani, y el presidente Obregón. El secretario de Gobernación, Enrique Colunga, había enviado al Congreso días atrás un vasto expediente con información que reforzaba lo establecido en el informe de Pani en relación con una serie de acuerdos incumplidos por parte de De la Huerta con el Comité Internacional de Banqueros. Las galerías y los palcos se encontraban repletos de asistentes a la sesión especial en la que De la Huerta daría la cara públicamente por primera vez desde que fuera señalado de mal uso del erario nacional. Sus declaraciones estuvieron sustentadas con documentos que el mismo candidato leyó frente al pleno de la Cámara de Senadores. Con ello, trató de explicar la ausencia de recursos originalmente dirigidos al pago de la deuda externa. El entonces exsecretario de Hacienda aprovechó la ocasión y atacó a Pani y Obregón, quienes habrían aprovechado su renuncia al gabinete obregonista para desprestigiar su campaña rumbo al proceso electoral de 1924, utilizando, según él, falsos argumentos en su contra. CONSIGNA ADOLFISTA El 20 de noviembre de 1923, la portada de Excélsior destacó “Exministro De la Huerta se sinceró ayer ante el senado”. El Senado se reunió; me presenté e hice mis declaraciones desvirtuando todos aquellos infundios y ¡salí en medio de aplausos! Callistas, obregonistas, delahuertistas e independientes, todos prorrumpieron en aplausos”, escribió en sus memorias el propio De la Huerta. Una nutrida concurrencia acompañó a De la Huerta desde el Senado hasta su domicilio ubicado a la altura de la avenida Insurgentes y Reforma. “Una de las manifestaciones más numerosas y espontáneas”, dijo. Para sus detractores, la aparición de De la Huerta en la cámara alta, era un acto de propaganda política, sin embargo, los adolfistas consideraron que el político sonorense tenía todo su derecho de defenderse ante la nación. Aquí podrás acceder a noticias en tiempo real Conoce lo más viral en  Facebook Trending  Lee a los columnistas de  Excélsior Opinión clm