Río Blanco, Ver.- En la cima del volcán Pico de Orizaba, a 5 mil 700 metros sobre el nivel del mar, Carlos Peña le entregó el anillo de compromiso a Margarita Yonca para jurarle amor eterno, después de una larga relación que ahora consolidan con el matrimonio religioso.
La pareja de alpinistas, acompañados de familiares y amigos, ascendieron al Coloso de México, y cuando se sacaban la foto del recuerdo cerca del cráter, Carlos sacó de su mochila el anillo para entregárselo y colocarlo en su dedo a Margarita que feliz aceptó casarse hasta que la muerte los separe.
El tierno episodio culmina con un abrazo entre los prometidos que desde hace tiempo viven juntos y procrearon a dos hijos. El Pico de Orizaba se convirtió en el testigo de amor de la pareja que tiene su residencia en fraccionamiento San Javier.
Margarita y Carlos, decidieron dar ese paso importante en sus vidas para unirse en matrimonio celebrando la boda religiosa en los primeros meses del 2022 al que proyectan invitar a familiares y amigos.
Desde hace tiempo Carlos planeaba consolidar la relación con Margarita, y aprovechó la ocasión cuando escalaron y llegaron a la cima del Citlaltépetl, del náhuatl Citlalli (estrella) y Tepētl (montaña o monte), que en conjunto significa cerro o monte de la estrella, porque su cumbre nevada brilla todo el día.
El Pico de Orizaba es el escenario favorito de enamorados para demostrarse amor. Una pareja ya se casó ahí en las faldas y ahora, Margarita y Carlos se comprometieron en la parte más alta.
Es testigo de miles de historias de la humanidad, ha sido el medio de grandes sueños y metas alcanzadas. Se ha encargado de transformar a los seres humanos, ya que impone a todo aquel que mira su cumbre y, quienes tocan su cima, siempre regresan.
Por Emilio Gonzales
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